El tiempo no borra las palabras...
Tras varios años de descanso, no se olvida lo que un día fuimos, y gracias a quien lo fuimos. Todo ello quedó plasmado en el año 2008 con la dedicación de todas las costaleras de las dos cuadrillas que formamos bajo las trabajaderas del Señor de las Penas chiquito. No hace más de dos semanas cuando de nuevo esa persona, que lucho tanto por salir cada año de la mejor manera y andando como lo hacíamos, me trasladó que fue el mejor regalo que recibió. Es por esto, y porque sigo pensando que es la mínima muestra que se merece, el volver a publicar lo que quisimos escribirle esa noche.
Para todas las costaleras que formamos los costalitos del Señor de las Penas y que tanto le debemos a esa persona.
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